Autor: Gerard Toutain

Sobre la presunta universalidad del más allá

Sobre la presunta universalidad del más allá

Es una idea compartida por la gran mayoría de la gente de hoy que en todas las culturas, actuales o pretéritas, primitivas o desarrolladas, podemos encontrar la necesidad de un más allá, que en todas partes se extiende la creencia de que a este mundo que vemos subyace (o sobre-yace) otro, que no percibimos pero que sostiene la débil presencia del que sí percibimos; que de algún modo hay algo más allá (o más acá) que transciende a los pobres mortales. Es, además, convicción de esa misma gente el suponer que eso ocurre porque es connatural al hombre cierta categoría antropológica de carácter universal, a la que podríamos llamar «religión», que comporta la posibilidad de otro mundo, de modo que, aunque pueden existir individuos particulares capaces de rehuir toda creencia, difícilmente podría existir una sociedad completamente ajena al más allá o, si se prefiere, ajena a dios, a un creador superior e incomprensible que se encuentra fuera de nuestro alcance, etcétera.  Se dirá quizá que forma parte del trasfondo de toda cultura conocida el llenar …

Impresiones helenísticas sobre morfemas (y su recepción delirante)

Impresiones helenísticas sobre morfemas (y su recepción delirante)

Por lo menos desde Dioniso de Tracia los gramáticos han aceptado la división de lo que suele llamarse «género» (génos) en «masculino» (arsenikón), «femenino» (thelukón) y «neutro» (oudéteron) para referirse a ciertos morfemas de las lenguas indoeuropeas, o bien solamente en «masculino» y «femenino» en aquellas en las que solo se identifican dos, como en castellano. Dioniso parece recoger ya una tradición (por ejemplo, cuando nos dice que algunos «añaden a estos [géneros] dos más»), de modo que seguramente algunas de las categorías que hallamos en el texto de Dioniso eran comunes y bien arraigadas. Los nombres con los que Dioniso describe la lengua son, en general, de carácter —digamos— impresionista. Por ejemplo, se llama a la flexión ptôsis, que en griego significa «caída». Se percibe, por tanto, la flexión (nominal y verbal) como una caída (aunque se aplica sobre todo a ciertos morfemas de la flexión nominal). Los nombres elegidos son percepciones que se expresan de un modo muy plástico, casi se podría decir que poético. La ptôsis se tradujo en latín como casus, …