Grecia

Artes excutiente deo

Artes excutiente deo

En el canto XVIII de la Ilíada se describe con sumo detalle el escudo que Hefesto ha forjado para Aquiles tras la muerte de Patroclo. La obra del dios, perfectamente acabada, deja sin aliento a quien la contempla: en ella vemos cómo se mueven con naturalidad los hombres, aunque estén hechos de metal, y cómo mugen los bueyes, cazan los leones y ladran y olfatean los perros, cómo resuenan los ríos y el pasto fresco alimenta a los rebaños, y cómo las casetas bien techadas y los establos dan cobijo por la noche, y vemos también muchos otros prodigios admirables que seducen y embriagan los sentidos.  Baste este breve pasaje como testimonio (XVIII, 573-576): En él [el escudo] hizo [Hefesto] un rebaño de bueyes de cuernos rectos,y los bueyes, hechos de oro y estaño,se precipitaban mugiendo desde el establo hacia la pastura,a orillas de un río estrepitoso junto a un tambaleante cañaveral. No se trata solo de que Homero pretenda subrayar el temperamento y la extraordinaria destreza técnica de Hefesto para complacer a sus oyentes, …

Sobre la presunta universalidad del más allá

Sobre la presunta universalidad del más allá

Es una idea compartida por la gran mayoría de la gente de hoy que en todas las culturas, actuales o pretéritas, primitivas o desarrolladas, podemos encontrar la necesidad de un más allá, que en todas partes se extiende la creencia de que a este mundo que vemos subyace (o sobre-yace) otro, que no percibimos pero que sostiene la débil presencia del que sí percibimos; que de algún modo hay algo más allá (o más acá) que transciende a los pobres mortales. Es, además, convicción de esa misma gente el suponer que eso ocurre porque es connatural al hombre cierta categoría antropológica de carácter universal, a la que podríamos llamar «religión», que comporta la posibilidad de otro mundo, de modo que, aunque pueden existir individuos particulares capaces de rehuir toda creencia, difícilmente podría existir una sociedad completamente ajena al más allá o, si se prefiere, ajena a dios, a un creador superior e incomprensible que se encuentra fuera de nuestro alcance, etcétera.  Se dirá quizá que forma parte del trasfondo de toda cultura conocida el llenar …