Abigail Shrier

La mala terapia

Ya hace años que los políticos y los medios de comunicación vienen alertando del estado de la salud mental de los jóvenes. Se habla de crisis, de epidemia y, por supuesto, se busca desesperadamente una solución. Sin embargo, la periodista norteamericana Abigail Shrier ha escrito sobre cómo las medidas a las que tan generosamente destinamos recursos y esfuerzos podrían ser en realidad la causa misma del problema. En Bad Therapy, que Deusto publicará en español a finales de este mes, Shrier ofrece la mirada crítica y perspicaz que ya mostró en Daño irreversible para analizar una cuestión largamente debatida, pero casi siempre desde los mismos dogmas y prejuicios.  Es importante subrayar una advertencia que ella misma hace en una nota: este no es un libro que hable de los casos severos de enfermedad mental, que necesitan toda la ayuda y atención médica posible. El ensayo está escrito para «los preocupados, los temerosos, los solitarios, los perdidos y los tristes». Para este segundo grupo, mucho más numeroso, la obsesión por la salud mental podría estar teniendo …

Si veneno le pide llorando…

A finales de la década de los ochenta del pasado siglo, las alarmas sobre abusos sexuales a menores se dispararon en todo el mundo occidental. Aprovecharse de la inocencia de un niño para satisfacer el deseo de un adulto añade a las iniquidades de la violación un grado de crueldad que, para salvaguardar el honor de la especie, no dudamos en calificar de inhumano. Era algo que ocurría en silencio y a lo que durante mucho tiempo no se le concedió en la sociedad mayor gravedad que a la sodomía, el pecado nefando con el que generalmente se confundía en los textos legales y en la opinión pública; y a pesar de que el rechazo moral con el que se contemplaba se fue acentuando en el siglo XX, si acaso se tenía noticia de que algún pariente o vecino practicaba esa pravedad, eran frecuentes la componenda y el disimulo: a menudo, la reputación de los mayores se tenía por un valor más alto que la libertad de los menores. El despertar de la conciencia social …