Autor: Víctor Ramos

La gravitación técnica

El ser humano es curioso por naturaleza. Desde el principio de nuestra existencia levantamos la cabeza hacia el cielo en busca de respuestas en un cosmos repleto de pequeñas luces. Estos faros en la oscuridad se analizaban antiguamente con la vista en busca de ciertos patrones que pudiesen dar lugar a alguna señal divina. No fue hasta el año 1609, en plena Revolución Científica, cuando se construyó el primer telescopio para mirar el firmamento con mayor profundidad, revolucionando completamente la astronomía. Desde entonces se han hecho innumerables avances tecnológicos y descubierto infinidad de cuerpos celestes, pero el principio sigue siendo el mismo. En Las olas del espacio-tiempo: la revolución de las ondas gravitatorias, Matteo Barsuglia narra el descubrimiento de las ondas gravitatorias, desde su predicción teórica hasta su reciente descubrimiento, compartiendo sus vivencias científicas en el laboratorio Virgo, uno de los laboratorios pioneros en la detección de ondas gravitatorias. Así describe Barsuglia el instante que cambió la historia de la física: En medio de la algabardía del planeta, los dos detectores LIGO en Estados Unidos …

Dios y la ciencia moderna

El hecho de que nuestra realidad esté regida por unas leyes aparentemente lógicas y no aleatorias nos induce a pensar que la creación del cosmos requiere de una explicación de índole científica. Sin embargo, la ciencia es todavía incapaz de explicar la posible existencia, o inexistencia, de un ser supremo, omnipresente, omnisciente u omnipotente que sea el creador de nuestra realidad. Esto nos plantea la duda de si la existencia de Dios se puede demostrar mediante la ciencia o solamente Dios mismo puede demostrar su existencia. Asimismo, en caso de aceptar su existencia, debemos plantearnos también la relevancia de Dios en la creación del cosmos. Todo lo que entre sí se relaciona en una mutua armonía, ha de estar ligado entre sí en un solo ser del cual depende en su totalidad. Por consiguiente, existe un ser de todos los seres, una razón infinita y una sabiduría autónoma de donde hasta en su sola posibilidad la naturaleza deriva su origen en toda la esencia de las determinaciones. Ahora ya no se puede negar la capacidad …